sábado, 16 de enero de 2010

La marmita olímpica

La humeante sopera descansó en el centro de la mesa, con el cucharón de plata metido en las entrañas, y rápidamente se llenaron los platos. ¡Soberbia sopa! Flotaban en su superficie las lunas de grasa, y entre las rebanaditas de pan impregnadas de suculento líquido, los menudillos de la gallina, las tiernas yemas de color de ámbar y los negruzcos hígados, que se deshacían al entrar en la boca. Todos comían con apetito, especialmente don Juan, que, a pesar de su sobriedad de avaro, era un tragón terrible al entrar en mesa ajena.
[...]
Rafael, en cuatro cucharadas, se tragó su ración, poniéndose al nivel de los demás cuando salió el cocido, dos fuentes magníficas, que exhalaban un vaho consolador, un tufillo alimenticio que se colaba hasta el fondo del estómago. En la una, las patatas amarillentas, los reventones garbanzos sacando fuera del estuche de piel su carne rojiza, la col, que se deshacía como manteca vegetal, los nabos blancos y tiernos, con su olorcillo amargo; y en la otra fuente las grandes tajadas de ternera, con su complicada filamenta y su brillante jugo; el tocino temblón como gelatina nacarada; la negra morcilla reventando, para asomar sus entrañas al través de la envoltura de tripa; y el escandaloso chorizo, demagogo del cocido, que todo lo pinta de rojo, comunicando al caldo el ardor de un discurso de club.


Adivinadlo. Tengo exámenes y estoy resfriada; con el tiempo que ha estado haciendo, son cocidos como éste, descrito magistralmente por Blasco Ibáñez en "Arroz y Tartana", los que visitan mis sueños más húmedos. Tengo hambre T.T

5 comentarios:

  1. Andaba yo pensando qué comentar de esto (descartando la retahíla de improperios que me han venido a la cabeza cuando me has pillado desprevenido, sin comer y en ayunas desde las seis de la madrugada) y se me ha ocurrido que no podías haber puesto un título mejor. Ese cocido es OLÍMPICO.

    Para calmar el hambre, mientras procuro no borborigmear demasiado, me voy al diccionario de la RAE y busco "olímpico", no vaya a ser que por ansiaviva meta la pata. Y como no podía ser de otra manera, leo con asombro que "olímpico" es también, oficialmente... un "Emparedado de tres capas de pan de molde sin corteza relleno de jamón, queso, huevo duro, lechuga, tomate y mayonesa"

    Y yo sin comer. Ahora cualquiera va a la hamburguesería.

    Me cagüen en la RAE...

    ... Blasco, coño, eso se avisa...

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  2. Oh, no, no sabía lo del sandwich, Jose! Siento haberte mandado de cabeza a las fauces del emparedado olímpico ^^U
    Pero suena de bien el cabrón... ya tengo hambre otra vez! -.- Esto es un sin vivir XD

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  3. xDD LOL, menos mal que acabo de cenar porque si no... Suena bien el cocido este, qué pena que una sea una completa inútil frente a los fogones U U...

    (Cuánto tiempo sin pasarme, la vuelta a las clases no me sienta nada bien T T...)

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  4. Podrías estar peor. Yo tengo un examen de medieval mañana y aquí estoy, viendo a Ray William Johnson en YouTube ^^U

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