No sé quién eras. Ha pasado mucho tiempo y sigo sin saberlo. Hay muchas preguntas que me hago. La primera de todas es cómo soporté seis meses de maltrato psicológico, de "tú no tienes ni puta y idea" y de "cuando te deje me follaré a esa", cuando ni siquiera el sexo era bueno, cuando ni siquiera te amaba.
¿Por qué?
¿Quién puñetas eres?
Durante un tiempo creí que eras un monstruo, uno de esos antihéroes sin compasión ni moral que andaban por ahí poniéndose el mundo por montera y viviendo intensamente sin pensar en los demás. Ahora ya no os tengo miedo, porque sé que esas personas no existen. Pero entonces lo creí, y también creí que yo no tenía nada que hacer contra ti, pobre de mí.
Ahora sé que estabas bien jodido y que me estabas obligando a mí a pagar con mi humillación y con mis lágrimas un daño que otra persona te hizo y que fuiste demasiado débil para superar. Ahora sé que otras personas que me putearon en el pasado eran como tú. Ahora ya puedo reírme de vuestro cinismo y de vuestra crueldad, porque no son más que una rabieta de adultos. Y una vez se ve todo lo que hay detrás, pierde el glamour.
Sin embargo, sigo sin saber quién coño eras. ¿Cómo habría de creerte una sola palabra, cuando no parabas de mentir? ¿Cómo habría de saberlo si estabas todo el día metido en el traje de un personaje mezquino y bien vestido que te habías inventado para que nadie te viera? ¿Cómo puedes dormir por las noches?
Ah, cuántas preguntas.
¿De qué demonios tenías miedo y por qué estabas tan furioso? ¿Por qué yo? ¿Sigues jurando que jamás lloras después de haberte visto con los mocos colgando y agarrado a mis rodillas, pidiéndome que no te dejara? ¿Qué vas a hacer cuando tengas cuarenta años y tu padre haya muerto y tus amigos se hayan aburrido de ti y no tengas a otra "guarri" (sé que nos llamabas así) a la que follarte y estés solo, solo, solo?
Nunca lo sabré.
¿Qué coño te pasa? ¿Piensas dejar algún día toda esa mierda atrás o dejarás que te mate? ¿Por qué tuviste que vengarte conmigo? ¿Por qué, por qué, por qué te soporté durante seis meses, por qué lloré cuando te marchaste si no me diste nada y yo lo sabía?
...
¿Por qué, si eras tan listo y tan culto, cuando tenía ganas de hablar siempre le llamaba a él, a él a quien todos creéis un pobre tonto?
Esa es la única respuesta que me sé.
Saben los dioses cuánto necesitaba decirlo.
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Y yo me quejaba de mis relaciones destructivas... creo que todo el mundo tiene a alguien así en su historial.
ResponderEliminarMenos mal que ya no tienes nada que ver con él.
Ya te digo. Con la gente estupenda que hay en el mundo, y tanto imbécil suelto para cagarla.
ResponderEliminarDos cosas,
ResponderEliminarSiento que te toparas con semejante individuo. Y sobre todo me alegro que te fortaleciera aquello y no te quebrara.
Nunca oistes aquella frase "Si he de morir no lo are solo". Hay gente que siente tanto dolor que no puede soportarlo y prefiere arrastrar a todo el que pueda en su espiral de locura por aquello de "como el tambien esta jodido no me siento tan mal". y aun que entiendo su comportamiento me repatea la existencia de gente asi. Recuerdan cosas que prefiero olvidar.
Se despide Tzun
Mariajosecerutiandrés, he remodelado mi blog. Ahora actualizaré bastante más a menudo que antes... Te he agregado!
ResponderEliminarBisou...
Ya se sabe, lo que no te mata...
ResponderEliminarDentro de mí, era desgraciado.
ResponderEliminarAhora veo que nada fue en vano,me curaste.
Recuerdo cada una de las veces que me abrazaste.
Infinitas gracias María José.
O